Bueno, ayer ya fui a recoger el coche después del cambio de embrague. La verdad es que ha cambiado como del día a la noche. Parece otro coche. Ya no tiene las dichosas vibraciones ni el ruido raro del motor en los cambios de marchas. Supongo que llevaba ya tanto tiempo con el problema que ahora parece que no sea el mismo coche.
Según me han dicho en taller han puesto otra referencia de embrague que está mejorado respecto el que tenía antes.
Al final se han portado bien en Hyundai, lo cual en un principio no me esperaba.