Te recomiendo que los tintes. Yo compré primero los parasoles y es un auténtico rollo. Los que se cogen con ventosas se caen cada dos por tres, luego hay otros que van a presión, pero al ser los cristales traseros del Tucson tan pequeños es difícil encontrar la medida más adecuada, aunque los encontré la final en Carrefour, pero da igual, porque los enanos, a poco que se aburren, los arrancan del cristal y empiezan a quejarse del sol.
En resumen, me fui a un concesionario de RALARSA, que hay un montón en todo España, y por 80 euros me los tintaron (llamémoslo así, pero lo que te hacen es pegar una película muy, pero que muy fina en el cristal, no hay otra opción, y es lo que te hacen en todos lados si los cristales no vienen ya tintados de fábrica), con garantía por 10 años, y con el sello de arena y el certificado para la ITV
En mi caso elegí el color más oscuro, el coche queda precioso, los enanos protegidos del sol, y ellos ven perfectamente. Eso sí, a tí te tocará acostumbrarte porque, al principio, te da la impresión de no ver nada por el retrovisor, pero ya te digo que es acostumbrarse.
Lo jodido, eso sí, es en los aparcamientos subterráneos oscuros, donde tienes que tirar de retrovisores exteriores y sensor de aparcamiento, pero sin más problemas.