Ese sistema es muy útil para adelantamientos. Vas en 6ª y de repente encuentras un camión largo u otro vehículo lento (por ejemplo a 70 u 80kmh) y quieres adelantar pero necesitas hacer el adelantamiento lo más rápido posible porque viene una curva cercana, un cambio de rasante o se aproxima otro vehículo en la distancia (pero con margen para realizar el adelantamiento de forma segura). Pues de 6ª bajas a 4ª, apretas a tope hasta esa zona del acelerador y el coche de repente vuela.
Se puede poner de 80 a 120kmh fácil, en nada de tiempo y puedes hacer el adelantamiento limpiamente y muy rápido para mayor seguridad. Es ahí donde el motor GDI 1.6 atmosférico de 16v responde mejor y empieza a sobresalir con luz propia cerca de las 5000 vueltas, donde también entra su máximo par. Y lo mejor es que si le pisas sigue acelerando rápido hasta las 6400 vueltas donde el rugido del motor y su respuesta son increíbles. Yo lo uso para momentos puntuales en que se necesita un extra de potencia y aceleración, y la verdad es que no incremeta en nada el consumo medio porque es muy poco tiempo lo que suele durar el momento de locura de revolución del motor (aunque la verdad es que veo que el motor va muy comodo entre 4000 y 5000 vueltas (está diseñado para ello). Es un placer que uno se da de vez en cuando, a la vez de un sistema que permite mucha seguridad a la hora de realizar maniobras precisas y rapidas, anticipándose a las situaciones en carreteras secundarias con poca visibilidad y zonas de adelantamiento muy escasas y cortas.
Las técnicas de conducción deportiva con este motor como punta-tacón, doble embrague, etc. ya las dejamos para otro momento. Fiabilidad, economía, respuesta, bajo ruido, velocidad, comportamiento noble y lineal, potencia cuando se necesita, la verdad es que no se puede pedir más a este motor gasolina de Hyundai, y eso para mi, viniendo de motoracos atmosféricos de seis cilindros, 3.0L, 24v y casi 250cv (y 13L/100km), dice mucho de nuestro Tucson.